Según Ghiani (2004), la logística puede definirse como la planificación y el control de los productos y la información en una organización. Su objetivo es entregar materiales a un destino determinado por otro tratando de optimizar una medida concreta y garantizando la satisfacción de un conjunto particular de restricciones. Estas definiciones pueden simplificarse para significar la gestión del flujo de bienes y servicios desde el punto de fabricación hasta el punto de consumo, garantizando que se cumplen los requisitos del consumidor. Las actividades de la logística incluyen la integración de la información, el almacenamiento, el embalaje, el inventario, la seguridad, el transporte y la manipulación de materiales. La logística complementa la cadena de suministro añadiendo valor al lugar, así como utilidad en el tiempo.

La logística se identifica en diferentes campos debido a su valor de rendimiento. Estos ámbitos incluyen la adquisición, la posventa, la producción, la eliminación y la distribución. Este documento identificará las áreas en las que las organizaciones involucran la logística, así como la esencia de una logística eficaz para una organización.

Estos campos de la logística determinan actividades específicas. La logística de aprovisionamiento implica decisiones de compra, gestión de proveedores y otros, así como estudios de mercado. El principio clave de la logística de producción es conectar el aprovisionamiento con la logística de distribución. Este campo de la logística determina las capacidades de producción en función de los recursos disponibles en respuesta a la logística de distribución. La logística de distribución se ocupa de la entrega de productos acabados al consumidor o más bien a los clientes. Sus componentes incluyen el procesamiento, el almacenamiento y el transporte. Esta logística es esencial porque el momento, el lugar y la cantidad de producción difieren del momento, el lugar y la cantidad de consumo.

Hoy en día, la logística se ha simplificado gracias a los avances tecnológicos. Las complejidades que dificultan una gestión logística eficaz pueden ahora visualizarse, modelarse, optimizarse y analizarse mediante un software de simulación específico. Estas complejidades han hecho necesario el uso de este software. Las empresas de éxito utilizan este software para realizar el trabajo de análisis logístico y, de este modo, proporcionar estrategias eficaces de gestión de la oferta y la demanda. Los problemas de logística se dan sobre todo en organizaciones que se dedican a la entrega de productos, pero también pueden darse en empresas que prestan servicios (Ghiani, 2004). Ejemplos de ello son la recogida de basuras, los servicios posventa y el reparto de correo, entre otros. El mantenimiento y el coste operativo de la logística es otro obstáculo para su uso. Una investigación realizada en Estados Unidos en 1997 demostró que las organizaciones utilizaban 862.000 millones de dólares como gasto total en logística. Por eso es esencial que las organizaciones sepan cómo minimizar los costes logísticos (Rushton, 2000).

La fiabilidad y la sostenibilidad son otros factores que afectan a la eficacia de la logística. Los sistemas y equipos fiables deben ser capaces de cumplir la finalidad prevista durante el periodo identificado y en las condiciones establecidas mediante una logística eficaz. Una logística ineficaz dará lugar a una probabilidad errónea sobre la capacidad de rendimiento de los sistemas, lo que provocará pérdidas masivas. Así pues, la fiabilidad proyectará la probabilidad de los sistemas y equipos de una organización (Landford, 2006).

En conclusión, la cuestión principal de la logística es decidir cómo y cuándo se enviarán, transportarán y almacenarán las materias primas y los productos acabados. Esto, a diferencia de otras gestiones de operaciones, es más evidente en las sociedades modernas. Un sistema logístico se compone de instalaciones que se corresponden con los servicios de transporte. Las instalaciones son lugares donde se procesan las mercancías, e incluyen centros de fabricación, centros de distribución, terminales de transporte y vertederos, por mencionar sólo algunos. Los servicios de transporte mueven las mercancías entre las instalaciones.